Hola, queridas mamás y papás.
En Integra Vidas recibo muchas preguntas de ustedes, pero hay una que me hacen con muchísima frecuencia: ¿Qué hago si mi hijo no quiere salir de un lugar como el parque, una tienda o una fiesta, y se resiste o corre por todos lados?
Y sí, yo sé que es una situación muy común… y muchas veces estresante.
Quiero compartirte algunas estrategias simples pero efectivas que puedes aplicar en casa desde hoy mismo.
La clave está en anticipar y acompañar
Una de las herramientas que más me gusta recomendar es la anticipación. Antes de salir de casa, háblale a tu hijo sobre lo que van a hacer. Por ejemplo:
“Vamos a estar en el parque un ratito, y luego vamos a ir a comer algo rico.”
Esto le da al niño un marco de referencia claro y predecible. Puedes decirle también cómo esperas que se comporte: que juegue bonito, que escuche cuando sea hora de irse, y que se porte bien al salir.
Usa un temporizador para marcar el tiempo
Otra estrategia muy útil es usar un temporizador o una alarma en el celular. Antes de que empiece la actividad, dile:
“Vamos a estar aquí hasta que suene este reloj. Cuando suene, sabremos que es hora de irnos.”
Mientras juegan o están en la tienda, puedes ir recordándole suavemente cuánto tiempo falta. Esto no solo prepara al niño emocionalmente, sino que lo ayuda a desarrollar nociones de tiempo y autocontrol.
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Háblale con calma y ofrece alternativas divertidas
Sé que a veces nos gana la desesperación, pero en esos momentos lo más importante es manejar nuestras propias emociones. Evitemos gritar o actuar con frustración. En lugar de eso, acércate y háblale suave al oído.
También es muy útil ofrecer algo divertido después. Por ejemplo:
“Cuando lleguemos a casa, vamos a pintar juntos por 15 minutos”, o
“Después de bañarnos, jugamos un ratito con los bloques.”
Esto transforma la transición en algo más agradable para el niño.
Recuerda cumplir tus promesas
Si le prometiste algo, cúmplelo. Para los niños, esto fortalece la confianza y su sentido de seguridad. No se trata de darles premios todo el tiempo, sino de que ellos sientan que pueden confiar en lo que decimos.
Y, por último, te lo digo con el corazón: no se trata de estar horas y horas con ellos. Se trata de la calidad del tiempo que compartimos. Unos minutos de juego o una conversación mirándolos a los ojos pueden marcar la diferencia.
En resumen:
- Anticipa lo que harán antes de salir de casa.
- Usa un temporizador para que el cambio no sea abrupto.
- Habla suave, con amor, y evita gritar.
- Ofrece una actividad divertida para después.
- Cumple tus promesas.
- Cuida su autoestima en todo momento.
Nos vemos en el próximo IntegraTip. ¡Un abrazo grande!
Integra Vidas 
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